viernes, septiembre 01, 2006

Los tres mosqueteros

El otro día estaba dándole vueltas a eso que escribió poli como contestación a una entrada de snurfel. Se refería a las miles de personas que podemos ser, a la cantidad de versiones individuales de nosotros mismos que podemos llegar a ofrecer y que no reflejan nuestro verdadero yo (no sé cómo explicarlo...). Es la suma de estas individualidades las que dan sentido al conjunto y, a la vez, cada una, condiciona a las demás. La hija, la amante, la amiga, la hermana, la compañera de trabajo, la estudiante... Dándole vueltas a todo esto, pensé en la forma en que nos presentamos ante nuestros amigos y, sobre todo, en la relación que mantenemos.

Me doy cuenta de cómo la visión que se tiene de uno mismo puede variar muchísimo de la que tienen los demás de ti, desde fuera. Cada uno adopta un rol en el grupo, no siempre el que le gustaría... a veces el que inconscientemente hace falta que alguien ejerza y, por lo que sea, nadie cubre; y otras veces el que más se adapta al carácter del actor en cuestión. Hay mucho trabajo, pero se reparte de forma rápida, sin negociación. Hay ocasiones en que los papeles cambian, hoy me toca a mí ser responsable (nooooooooooooooooo!!!!!!!) pero, por lo general, suelen mantenerse.

Muchas veces me siento incómoda en mi papel (no sé si en mi papel o en mí en general) y creo que los demás sólo sacan mi lado negativo. Creemos aparentar en ocasiones cosas que realmente no somos o, por lo menos, para nosotros mismos no somos. No nos reconocemos en los demás. Sin embargo, seguramente los demás nos conocen mejor que nosotros mismos (ayuda mucho la práctica, ver el asunto desde fuera...) A veces me preocupo mucho pensando lo que los demás estarán pensando, la imagen que pueden tener y todo eso. Qué más da, después de todo, cuando soy la amiga, juego en casa.

3 Comments:

Blogger ringo said...

y yo d´artagnan, claro...

16:25  
Blogger polisaria said...

¿sabes qué es lo malo de todo esto?
que no te guste el rol que te ha tocado...
A mi, hay días en que ser krusty el payaso me repatea... Y hay otros que me encanta.
¿sabes otra cosa mala? Que pensar todo el rato lo que podrían pensar los demás, hacer lo que crees que los demás quieren que hagas, agradar a todo el mundo todo el rato... es agotador!!!!

22:54  
Blogger snurfel said...

Yo creo que en ciertas ocasiones los roles nos los ponemos nosotros mismos.
Cada uno tiene una manera de "venderse" hacia los demás y elige un papel que desempeñar.
Coincido con vosotras en que lo más duro e todo esto es intentar agradar a los demás haciendo desempeñando el papel que te ha tocado (o te has puesto).

12:19  

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